El intrigante regreso de Westworld

Westworld ha vuelto por todo lo alto a HBO con su segunda temporada, una de las series más esperadas en el panorama actual que consiguió apasionarnos en 2016. Tras un casi dos años de espera, la ficción basada en la película Almas de Letal regresa con más misterio que nunca. Nos quedan muchos capítulos por delante, pero su primer episodio ya sabido conquistarnos. ¿Hacia dónde va la revolución de las inteligencias artificiales?
La temporada empieza allá donde lo dejamos a finales de la primera. Los invitados al parque se esconden de los sanguinarios robots que están en mitad de una revolución liderada por Dolores (Evan Rachel Wood). Tras la muerte de Ford (Anthony Hopkins) nadie saber hacia dónde se dirige el futuro de Delos, la empresa que dirige el negocio del parque. Una vez más, diversas tramas se presentan ante nosotros, siguiendo los pasos de los personajes. Tampoco estaremos exentos de pequeños viajes en el tiempo.
Bernard (Jeffrey Wright) se encuentra en la posición más difícil de todas. Nadie parece haberse dado cuenta de quién es realmente, aunque a veces parece que él mismo duda de su propia existencia, de su propio papel. Intentando ocultar su propia realidad, su línea nos muestra pequeños momentos hasta su rescate. Pero, ¿cómo ha llegado hasta ahí?
William o El Hombre de Negro (Ed Harris), muestra la trama más interesante. Tras encontrarse con el último recuerdo de Ford, por fin siente que puede enfrentarse a un verdadero reto: la esencia del parque y la búsqueda de su yo. El rencor de William lo que supone para él Westworld es su vida. Ahora, en igualdad de condiciones, William se enfrenta a su propio laberinto.
Por otro lado, Maeve (Thandie Newton) ha decidido no marcharse del parque y luchar por esa otra vida que recuerda, aquella en la que tenía una hija. Reteniendo como rehén al guionista Lee Sizemore (Simon Quaterman) y como aliado a Héctor Escaton (Rodrigo Santoro), Maeve está emprendiendo una búsqueda hacia su propia felicidad.
Y por último, está la linea de Dolores, la gran revolucionaria y la inteligencia artificial más adelantada de todas. Consciente de todas sus muertes, de todas sus vidas, cansada de vivir en un sueño eterno, Dolores siente la ira, el dolor por haber sido utilizada. Ahora, consciente de sus actos y emociones, quiere que todos los robots vivan libres, libres de las órdenes de los hombres. Porque ya no está en un sueño, sino en mitad de un prometedor futuro.
Muchas incógnitas, muchas tramas. Quedan nueve capítulos y muchos misterios por resolver. ¿Veremos los demás parques que posee Delos? Por el momento, ya sabemos de la existencia del parque Samurai y un tigre que viene de tierras lejanas. ¿Lograrán imponerse las inteligencias artificiales? ¿Tienen los humanos un arma preparado para desafiar a una revolución? ¿Cuál es el destino de William? Tan solo nos queda esperar.
Categorías